domingo, 5 de abril de 2015

Solomillo a la mostaza

  No es habitual que comparta recetas saladas, pero esta en concreto me encanta por lo bueno que queda y lo sencilla que es. A pesar de que no soy muy aficionada a la mostaza, el toque de esta receta queda muy bien porque es bastante sutil y a quien le guste más la mostaza se le puede añadir más salsa y todos contentos.


  Mi madre siempre la hace con solomillos de cerdo, pero alguna vez los he cambiado por pechugas de pollo y también queda muy bien.


  Ingredientes:
  • Solomillo de cerdo
  • Mantequilla
  • Mostaza
  • Sal
  • Un poco de harina para la salsa

  No pongo cantidades exactas porque realmente no es más que "un poco" de mantequilla o de mostaza, que por supuesto dependerá de gusto de cada uno. Yo utilizo una mostaza normalita porque como decía antes, no soy muy aficionada su sabor, y mientras más fuerte el sabor menos me gusta.

  La receta se hace en menos tiempo de lo que se tarda en escribirla. Encendemos el horno a 180º (arriba y abajo) para que se vaya calentando.

  En un molde rectangular, como de los bizcochos alargados de siempre, se pone unos pegotones de mantequilla un chorrito de mostaza.



  Se pone uno o dos solomillos con un poco de sal.



  Y otro poco de mantequilla y mostaza por encima.



  Es evidente que no tiene ninguna complicación. Se mete en el horno unos 15 o 20 minutos.



  Pasado ese tiempo se da la vuelta a la carne (con unas pinzas por ejemplo) y se vuelve a dejar en el horno unos 10 minutos más.



  Por supuesto el tiempo dependerá un poco de la cantidad de carne y cada horno. A mi me gusta más cuando el centro está hecho pero ligeramente rosado.

  Podemos aprovechar todo el jugo que suelta para hacer una salsa y acompañar la carne. Cuando todavía está caliente se puede separar la grasa que queda por encima, del resto que es la mostaza.



  Tampoco es que haya que separarlos con precisión, simplemente intentar quedarse primero con la grasa y luego utilizaremos la mostaza.



  El cuenco de la derecha, que es casi toda la grasa que quedaba en el molde, lo pasamos a un cazo y lo calentamos un poco. Se añade como una cuchara de harina.



  La cantidad es también imprecisa porque depende de la grasa que hayamos sacado del molde, pero tiene que ser como una bechamel, que haga como una pelota. Por eso es mejor empezar con poca harina y añadir si vemos que necesita más.



  Hay que dejarla tostar al fuego para que se le quite el sabor a "crudo" y entonces se le añade poco a poco la salsa de mostaza que teníamos apartada.



  Normalmente queda muy espesa, así que le suelo ir añadiendo agua poco a poco hasta conseguir una textura de salsa.



 Y ya está. Bueno, si uno quiere lucirse, se puede pasar la salsa por la batidora para darle una textura más fina. Y la carne se corta en filetes finos, normalmente los cortamos un poco inclinados que quedan mejor.



  Como veis es una receta que no requiere casi nada de trabajo. Con lo buena que queda la carne, se trata de una de mis preferidas.



  Además, siempre que la hago me acuerdo de mi amiga Malole, que le encanta, así que tiene un valor añadido.





3 comentarios:

  1. Mmmmm!!! Deliciosa no, lo siguiente ;) 1 beso enorme!!

    ResponderEliminar
  2. Lo hice el sábado y salió riquísimo!!!! Gracias!! :-)
    Besos,
    Marina

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegro muchísimo!!! Muchas gracias por confiar en la receta y por comentarlo!!! Saludos!

      Eliminar

Me encantaría seguir aprendiendo con tus ideas y comentarios. Muchas gracias por participar!