Para la tarde-noche de Halloween preparé algunas cositas para la merienda de las niñas y sus amigas. Afortunadamente lo hice poco a poco con cierta antelación porque el mismo 31 de octubre me puse malísima y no pude hacer nada. Tenía en mente añadir varios detalles más y completar un poco la decoración, pero se quedó en lo básico.
La idea de la tarta está copiada de TartaFantasía, que no solo tiene vídeos explicando cada paso de la decoración de la tarta sino que además proporciona una plantilla con las medidas del ataúd y de Kitty. Cuando se la enseñé a las niñas se quedaron encantadas, pero pensamos que una vampiresa pegaba más con el ataúd que la momia y por eso hice ese pequeño cambio.
Ingredientes:
Hice un bizcocho cuatro cuartos (con una buena cucharada de pasta de vainilla) de 5 huevos en un molde de unos 18x25 cm. La plantilla de Tarta fantasía me vino como hecha a medida.
Corté el bizcocho según la plantilla y lo rellené con ganache de chocolate para cubrirlo con fondant como en montaje de una tarta decorada. No hace falta dejar los laterales perfectos porque después irán cubiertos con más fondant para simular la madera del ataúd. Para hacer el acolchado basta una regla y un palillo o una esteca dresden.
Utilizando la regla como medida se marcan líneas paralelas por toda la superficie.
Después se coloca la regla en posición oblicua y se marcan líneas paralelas para formar como rombos.
En los cruces se pueden marcar pequeñas marcas con el palillo (o la esteca) para simular el acolchado.
No hace falta señalar todos los cruces, tan sólo los exteriores porque en el centro estará la Kitty.
Aunque así estaba estupendo, me pareció buena ocasión para darle un toque de brillo con un colorante metálico lavanda. Con el aerógrafo se puede dar una capa de color en un segundo y también se pueden hacer verdaderas maravillas, pero todavía no he aprendido.
Con un chorrito de colorante se pasa de este aspecto.
A este otro. Espero que se note la diferencia.
Como decía mi madre, parece acolchado de verdad y eso que el color era más azul de lo que yo pensaba.
Para terminar el ataúd hay que recubrir de madera los laterales. Bueno, con fondant marrón que parezca madera, quiero decir. Estiramos una tira de fondant marrón o combinando dos tonos de marrón para que el color no sea uniforme. Se marca un texturizador de madera y se corta a la altura del lateral de la tarta.
Se pega por todos los lados con un poco de pegamento comestible.
En la entrada de Tarta Fantasía dan un acabado todavía más perfecto haciendo que sobresalga ligeramente por encima del acolchado, pero yo estaba cansada y lo dejé ahí. En los cruces puse unas bolitas de azúcar que quedaron estupendamente.
Para la Kitty también utilicé la plantilla, pero en vez de cubrirla de vendas le hice un vestido de dracula. Empecé por la capa de rojo brillante y con un toque de colorante en polvo para acentuar un poco más el brillo.
Para copiar la figura con todas las marcas que necesito, suelo extender un poco de fondant y poner la plantilla encima. En vez de cortar directamente marco el perfil de la figura con una esteca o palillo incluyendo las líneas internas del dibujo.
Al levantar el dibujo se ven perfectamente por donde hay que cortar y las líneas interiores ayudan como referencia para las siguientes capas.
Normalmente al cortar con la cuchilla el borde queda muy marcado, en ángulo recto.
Me parece que la figura siempre gana mucho si se repasa el borde con la yema de un dedo para redondearlo. Yo suelo poner un pelín de grasa vegetal para que quede mejor.
Hay pequeños trucos para que los detalles queden lo mejor posible. Por ejemplo, para hacer los ojos se coge un pequeño churro de fondant negro y se corta por la mitad. Es más fácil cortar un churro por la mitad que hacer directamente dos bolitas con la misma cantidad de fondant, al menos a mi siempre me queda una ligeramente más grande que la otra.
Presionando ligeramente las bolitas por el centro conseguimos pequeños cilindros con los extremos redondeandos.
Y presionándolos a la vez con algo plano, por ejemplo la alisadora de fondant, se consiguen ojos prácticamente iguales.
Para los detalles de la ropa simplemente fui recortando piezas con ayuda de la plantilla y el lazo también es sencillo. Comenzamos igual que los ojos, haciendo un churro (más grande como es lógico) y cortándolo por la mitad para tener dos trozos aproximadamente iguales. Es bueno tener la plantilla al lado para ir midiendo y que el tamaño sea ajustado, ni demasiado grande ni demasiado pequeño.
Al presionar cada bolita por un lado, haciéndola rodar en la palma de la mano, se consigue una lágrima.
El lazo tiene los lados menos redondeados, así que se puede presionar con un dedo para dejar los extremos más angulosos.
Y con un bolillo, la esteca que tiene una esfera, se presiona para terminar de darle forma.
Con una bolita más en el centro estaría terminado, pero era deseo expreso de Andrea que el lazo tuviera mucha purpurina y como sus deseos son órdenes, lo cubrí con purpurina roja.
Recomiendo utilizar la purpurina siempre en el último momento porque suele quedarse pegada a las manos, herramientas, encimera... a todas partes menos a donde se supone que tiene que ir. Yo nunca soy capaz de limpiarme las manos suficientemente bien para eliminarla toda.
Pensaba poner más detalles alrededor de la tarta y hacer mejores fotografías, porque esta última la hice con prisas y con el teléfono sin pensar que no estaría para terminarla (ni catarla) el día de la merienda. Me consuela que la merienda fue un éxito y que las niñas se lo pasaron estupendamente, que es lo que importa.
Ingredientes:
- Un bizcocho, en mi caso un cuatro cuartos de 5 huevos.
- Almibar para calarlo.
- Ganache de chocolate para el relleno.
- Fondant.
- Pegamento comestible.
- Bolitas de azúcar para adornar.
- Colorantes en pasta para el fondant.
- Una regla, cuchilla, esteca dresden (o palillo), bolillo (o una esfera pequeña).
Hice un bizcocho cuatro cuartos (con una buena cucharada de pasta de vainilla) de 5 huevos en un molde de unos 18x25 cm. La plantilla de Tarta fantasía me vino como hecha a medida.
Corté el bizcocho según la plantilla y lo rellené con ganache de chocolate para cubrirlo con fondant como en montaje de una tarta decorada. No hace falta dejar los laterales perfectos porque después irán cubiertos con más fondant para simular la madera del ataúd. Para hacer el acolchado basta una regla y un palillo o una esteca dresden.
Utilizando la regla como medida se marcan líneas paralelas por toda la superficie.
Después se coloca la regla en posición oblicua y se marcan líneas paralelas para formar como rombos.
En los cruces se pueden marcar pequeñas marcas con el palillo (o la esteca) para simular el acolchado.
No hace falta señalar todos los cruces, tan sólo los exteriores porque en el centro estará la Kitty.
Aunque así estaba estupendo, me pareció buena ocasión para darle un toque de brillo con un colorante metálico lavanda. Con el aerógrafo se puede dar una capa de color en un segundo y también se pueden hacer verdaderas maravillas, pero todavía no he aprendido.
Con un chorrito de colorante se pasa de este aspecto.
A este otro. Espero que se note la diferencia.
Como decía mi madre, parece acolchado de verdad y eso que el color era más azul de lo que yo pensaba.
Para terminar el ataúd hay que recubrir de madera los laterales. Bueno, con fondant marrón que parezca madera, quiero decir. Estiramos una tira de fondant marrón o combinando dos tonos de marrón para que el color no sea uniforme. Se marca un texturizador de madera y se corta a la altura del lateral de la tarta.
Se pega por todos los lados con un poco de pegamento comestible.
En la entrada de Tarta Fantasía dan un acabado todavía más perfecto haciendo que sobresalga ligeramente por encima del acolchado, pero yo estaba cansada y lo dejé ahí. En los cruces puse unas bolitas de azúcar que quedaron estupendamente.
Para la Kitty también utilicé la plantilla, pero en vez de cubrirla de vendas le hice un vestido de dracula. Empecé por la capa de rojo brillante y con un toque de colorante en polvo para acentuar un poco más el brillo.
Para copiar la figura con todas las marcas que necesito, suelo extender un poco de fondant y poner la plantilla encima. En vez de cortar directamente marco el perfil de la figura con una esteca o palillo incluyendo las líneas internas del dibujo.
Al levantar el dibujo se ven perfectamente por donde hay que cortar y las líneas interiores ayudan como referencia para las siguientes capas.
Normalmente al cortar con la cuchilla el borde queda muy marcado, en ángulo recto.
Me parece que la figura siempre gana mucho si se repasa el borde con la yema de un dedo para redondearlo. Yo suelo poner un pelín de grasa vegetal para que quede mejor.
Hay pequeños trucos para que los detalles queden lo mejor posible. Por ejemplo, para hacer los ojos se coge un pequeño churro de fondant negro y se corta por la mitad. Es más fácil cortar un churro por la mitad que hacer directamente dos bolitas con la misma cantidad de fondant, al menos a mi siempre me queda una ligeramente más grande que la otra.
Presionando ligeramente las bolitas por el centro conseguimos pequeños cilindros con los extremos redondeandos.
Y presionándolos a la vez con algo plano, por ejemplo la alisadora de fondant, se consiguen ojos prácticamente iguales.
Para los detalles de la ropa simplemente fui recortando piezas con ayuda de la plantilla y el lazo también es sencillo. Comenzamos igual que los ojos, haciendo un churro (más grande como es lógico) y cortándolo por la mitad para tener dos trozos aproximadamente iguales. Es bueno tener la plantilla al lado para ir midiendo y que el tamaño sea ajustado, ni demasiado grande ni demasiado pequeño.
Al presionar cada bolita por un lado, haciéndola rodar en la palma de la mano, se consigue una lágrima.
El lazo tiene los lados menos redondeados, así que se puede presionar con un dedo para dejar los extremos más angulosos.
Y con un bolillo, la esteca que tiene una esfera, se presiona para terminar de darle forma.
Con una bolita más en el centro estaría terminado, pero era deseo expreso de Andrea que el lazo tuviera mucha purpurina y como sus deseos son órdenes, lo cubrí con purpurina roja.
Recomiendo utilizar la purpurina siempre en el último momento porque suele quedarse pegada a las manos, herramientas, encimera... a todas partes menos a donde se supone que tiene que ir. Yo nunca soy capaz de limpiarme las manos suficientemente bien para eliminarla toda.
Pensaba poner más detalles alrededor de la tarta y hacer mejores fotografías, porque esta última la hice con prisas y con el teléfono sin pensar que no estaría para terminarla (ni catarla) el día de la merienda. Me consuela que la merienda fue un éxito y que las niñas se lo pasaron estupendamente, que es lo que importa.
Te ha quedado muy bonita! y horrorosamente dulce. Enhorabuena :)
ResponderEliminarHola! te ha quedado preciosa! y un paso a paso genial! besis
ResponderEliminarQue precioso te quedó, seguro que lo preparo en poco tiempo.Bsss y gracias.
ResponderEliminarMe encanta, te ha quedado preciosa. Y el paso a paso muy bueno.
ResponderEliminarBesos guapa
¡Gracias! Me alegro de que os guste
ResponderEliminarQué graciosa, me encanta. Dracu-kitty es más elegante que Hello Kitty, jajaja. Un saludo!
ResponderEliminarQué bonita te quedó¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarQue pasada!!! Da hasta pena que se destrozara para comer! Jajaja
ResponderEliminarQué lindo ataud de Kitty! Me encanta! Que ideal para la ocasión
ResponderEliminarFelicidades por tan estupendas y originales ocurrencias.
Saludos.